Friday, August 18, 2006

ALEJANDRO

Estaba sentado fumando un cigarro, mentolado de los que me gustan, y saboreando un delicioso café colombiano, que según los expertos, es el mejor café del mundo... fué cuando ví que bajaba las escaleras que en frente de mí me daban la mejor vista. No sé si el cigarro, el café, la fría brisa de la media tarde y los eucaliptos y cipreses del rededor hicieron que se viera como el ser más bello sobre la faz de la tierra. Pero lo era. Blanco como la nieve y mejillas rosadas tenues, ofrecían el mejor contraste con el color azul cielo de sus ojos... No sé por qué, pero su mirada cruzó la línea de la mía... Se dirigió a comprar una bebida cola, y se sentó en la misma banca donde estaba sentado yo. Al verlo de cerca, me dí cuenta que era algo más alto que yo, la piel era virgen y su sonrisa como una gran fotografía del mar en medio del tráfico de la gran ciudad. Después detallé sus labios: rojos como el color de la manzana y recordé por un instante aquel cuento que escuché cuando niño. Pero de inmediato supe que no debía hacerlo pues su masculinidad se perdía irrevocablemente con dicha historia y entonces recordé las historias que en la escuela leía sobre los griegos... Ese era el perfecto masculino. Como él.
Alejandro! saludó su compañera... Alejandro, como el magno... Y ella se ´fué. Qué bien! estabamos los dos, todavía solos. Y continuaba con mi fantasía griega y hasta romana cuando en el fondo de mis oidos escuché... tienes otro mentolado? ohhh! qué hermosura, qué melodía... hasta su voz era perfecta! le dí el cigarro y le prendí con la llama de una cerilla. Me dijo gracias mirando mis ojos verde oscuros, manteniendo por un instante su mirada en mí... Qué podría tener de defecto este prototipo de hombre?
pocos minutos después lo supe... su teléfono móvil sonó... Hola amor... le dijo a una voz masculina que escapaba por el auricular... su defecto momentáneo: estaba enamorado...

3 comments:

Thorin said...

Muy bueno.
A mi también me gustan los mentolados.

Anonymous said...

divina imperfeccion humana

JP said...

Hola, por aqui conociendo...La historia está del carajo eh?